
Vamos a celebrar el día internacional del beso conociendo un poco su anatomía y la forma mecánica en que funciona. ¿Qué músculos faciales hacen posible uno de los gestos más íntimos y emocionales que compartimos los humanos? el beso. Mas de 34 músculos de la cara participan en un simple beso.
- Orbicular de los labios: Este músculo rodea la boca y es esencial en el proceso del beso. Es conocido como el «músculo del beso», ya que permite los movimientos de los labios, como fruncirlos, estirarlos o hacer pucheros.
- Buccinador: Situados en las mejillas, estos músculos ayudan a mantener los labios en posición durante el beso, evitando que se colapsen hacia adentro.
- Risorio: Este músculo contribuye a la sonrisa y al estiramiento de las mejillas, añadiendo un toque de expresividad al beso.
- Músculos del mentón y de la mandíbula: Estos músculos son cruciales para abrir y cerrar la boca durante el beso. Además, permiten movimientos como el mordisqueo suave.
¿Y qué hacen todos juntos?
¡Muchísimo, trabajan en armonía, para que el beso resulte perfecto, fíjate que sinfonía:
El orbicular de los labios y los buccinadores mantienen los labios en posición y controlan la presión de los mismos contra los labios de la otra persona. El risorio añade una sonrisa o expresión adicional al beso, mostrando nuestra felicidad y afecto. Los músculos del mentón y de la mandíbula permiten movimientos suaves y sensuales, para seguir el ritmo del beso de nuestra pareja.
Curiosidades sobre los Músculos Faciales en el Beso
Tono Muscular, besar puede ayudar a ejercitar estos músculos, mejorando el tono muscular de la cara y previniendo la flacidez.
Expresividad, estos músculos no solo están involucrados en el beso, sino que también son clave en nuestra comunicación no verbal diaria, ayudando a expresar emociones como la felicidad, tristeza y sorpresa.
Beneficios para la Salud
Fortalecimiento, besar puede fortalecer estos músculos faciales, ayudando a mantener una apariencia juvenil y tonificada.
Liberación de Endorfinas, el beso libera endorfinas, las hormonas de la felicidad, que pueden reducir el estrés y mejorar el estado de ánimo.
Por lo tanto, los músculos faciales son los verdaderos héroes detrás de un beso apasionado. Desde el «músculo del beso», el orbicular de los labios, hasta los ayudantes en las mejillas y la mandíbula, cada uno juega un papel vital en transmitir amor, afecto y pasión.
Suena poco romántico, pero en tu siguiente beso recuerda la complejidad y belleza de estos músculos faciales. ¡Son ellos los que hacen posible este gesto tan humano y maravilloso!
Referencias
«The Anatomy of a Kiss: The Science of Smooching» by Natasha Ivanovic
«Facial Expression: Anatomy and Physiology» by Michel Cabanis, Pierre-Yves Boëlle, and Jean-Louis Dausse