
Lavarse la cara es todo un tema, y como tal tiene dos ángulos, lo haces bien y logras un beneficio para tu rostro o lo haces de la manera equivocada y lo perjudicas.
Veamos qué es hacerlo bien y mal.
Lo primero, el mejor momento para limpiarla es en la noche, así eliminas rastros de lo que vas acumulando en el día, esto porque durante la noche la piel “trabaja” en reparar y reponer los aceites que tu piel necesita para verse hidratada y nutrida.
Ahora veamos los sí y los no del lavado de cara:
- Sí a un desmaquillante bifásico, para retirar maquillaje y rímel, pero no tan grasoso que te deje la piel pesada, conoce el desmaquillante de Castor Oil de BOHCOCO, te encantará.
- Sí a un minuto de lavado de rostro y cuello.
- Sí a siempre usar toalla limpia (mil veces mejor que algodón)
- Sí a dejar una piel suave, tersa, fresca y revitalizada.
- No a frotar con un paño áspero
- No a la limpieza excesiva
- No a la limpieza insuficiente
- No a dejar una piel tirante, seca o con picazón
- No a la doble limpieza, únicamente en los siguientes casos:
Atletas o personas que sudan mucho para retirar bacterias.
Personas que usan protector solar mineral muy espeso.
Aquellos que usan mucho maquillaje.
Personas con piel extremadamente grasa, aquí va nuestra sugerencia; retirar el maquillaje con el desmaquillante de BohCoco, después lavar la cara con jabón especial y terminar con el tónico astringente de BohCoco para nivelar la producción de sebo.
Sigue estos tips y cuéntanos como sientes tu cara.
